La Hermandad de la Vera-Cruz ha vivido con intensidad y alegría los cultos de la Virgen de la Sangre, desde que se iniciaran el pasado día 4 de septiembre, víspera del Triduo, con el rezo del Santo Rosario, hasta su conclusión con la Función Solemne el día 8.
Varios han sido los momentos de especial relevancia que hemos podido contemplar durante estos días, en los que la Iglesia de San Benito, vestía sus mejores galas para recibir a nuestra Madre, la Virgen de la Sangre. Pero aún más que eso, el mejor regalo que ha recibido nuestra Madre, ha sido la gran muchedumbre de hermanos y fieles, de todas las edades, que han pasado todos
La familia crucera ha celebrado con gozo los cultos en honor de María Stma. de la Sangre, en la festividad de la Natividad de la Virgen María.
El domingo, víspera de la Natividad de nuestra Señora y tercer día del Triduo, se dedicó a la hora Santa de oración convocada por el Papa Francisco en todo el mundo, para orar por la paz en el mundo y en especial por los conflictos que azotan actualmente de violencia y muerte las naciones de Siria, Ucrania, Palestina, Isrrael e Irack. En este día y para la celebración de esta hora de oración tuvo lugar la exposición de S.D.M. El Santísimo Sacramento del Altar, en nuestra Iglesia de San Benito.
los días por la capilla para visitarla, contemplar su rostro sereno y afable, rezarle y recibir su bendición, en especial el día su Función y Besamanos, en el que la capilla se quedó pequeña para acoger a todos los devotos que allí se congregaron.
Extraordinaria ha sido la ilusión y énfasis que ha puesto el Grupo Joven de nuestra Hermandad para celebrar el día de nuestra Madre, a la que ofrecieron durante la misa del sábado una gran ofrenda floral en forma de canastilla de rosas y nardos. Ellos y ellas, los más jóvenes que trabajan por la Hermandad con desvelo y entusiasmo, son el mejor regalo que la Virgen de la Sangre pueda tener.
El día de la Virgen, 8 de septiembre, día en el que tantas generaciones desde hace siglos han venerado a la Santísima Virgen de la Sangre en nuestro pueblo, la capilla fue todo un homenaje de devoción y veneración hacia nuestra Madre, con una asistencia masiva de hermanos y fieles. El rezo, hecho plegaria por el coro “Aires de Gerena” que cantó de forma magistral la función de la Virgen, embriagó las almas que allí se congregaron para venerar a nuestra Titular, sus cantes y letras todas dedicados a nuestros Titulares, volvió a emocionarnos recordando aquellas antiguas Sevillanas que con tanto cariño dedicaron a la Virgen en el año 1973, los por entonces jóvenes componentes del grupo “Amigos de Gines”.
En el ofertorio, se le hizo entrega a la Virgen de la Sangre de un fajín bordado en hilo de oro, realizado y donado por nuestras hermanas Pepi Romero Giles y Encarni Luque Romero. Pieza que viene a engrosar el exquisito ajuar de la Virgen.
Y como colofón a estos días llenos de vivencias y confraternidad, la tradicional “Velá de la Virgen de la Sangre”, cinco días en los que se ha hecho latente el sentimiento de esta gran familia que es la Hermandad de la Vera-Cruz de Gerena. Especialmente emotivo fue la proyección en el patio de la capilla, del recibimiento del Señor tras su restauración, hace 25 años. Las luminarias del día 8, de nuevo pusieron el punto final a esta festividad, de forma elegante y sublime, al compás de la nueva plegaria estrenada por el coro “Aires de Gerena”.
La junta de Gobierno, quiere agradecer enormemente la colaboración y asistencia de tantos y tantos hermanos y hermanas que durante estos días han visitado la capilla, los cultos de la Virgen y la velá en su honor, haciendo que el patio de la Iglesia de San Benito, se quedara pequeño para albergar a todos ellos.
Que la Virgen de la Sangre, nos bendiga a todos una año más con su nacimiento, y pongamos todos los días en práctica lo que en sus cultos hemos oído y aprendido. Ella es Madre, Maestra, protectora nuestra y Reina de la Paz.
